FLORENTINA
GOMEZ MIRANDA: A UN AÑO DE SU MUERTE
EL
1º DE AGOSTO DEL 2011 FALLECIÓ LA EXDIPUTADA NACIONAL
POR LA UNIÓN CIVICA RADICAL
Por
Elena Luz González Bazán especial para Latitud
Periódico
2
de agosto del 2012
El
14 de febrero de 1912 nace Florentina, este mes de febrero fue
el centenario de su nacimiento.
Esta
mujer radical fue una incansable defensora de los derechos de
la mujer.
El Instituto de Pensamiento y Formación Moisés
Lebensohn (IML) de la Unión Cívica Radical junto
al Foro Permanente de Mujeres Radicales (Fopemura) y al Comité
Capital de la Unión Cívica Radical de la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires llevó a cabo el martes
14 de febrero en horas de la tarde homenajes a esta mujer de
las filas radicales que trascendió el partidismo radical.
La
exdiputada nacional falleció el 1º de agosto de
2011 y destacó por ser una incansable luchadora por los
derechos de la mujer, los derechos civiles y las minorías.
Florentina
nació en Olavarría el 14 de febrero de 1912. En
1929 se recibió de maestra y, en 1945, de abogada en
la Universidad Nacional de La Plata. Fue diputada nacional entre
1983 y 1991.
Durante
su mandato presentó más de 150 proyectos. Entre
ellos, autoridad de los padres compartida; divorcio vincular;
pensión al viudo; pensión al cónyuge divorciada;
igualdad de los hijos matrimoniales y extramatrimoniales; derecho
de la mujer a seguir usando el apellido de soltera luego de
casada; pensión de la concubina y concubino.
Por su lado, el Diputado Nacional (UCR-Tucumán), Luis
Sacca sostuvo: “Florentina fue un ejemplo de militancia,
coraje, coherencia, perseverancia, valentía y siempre
actuó de acuerdo con sus convicciones” expresó
el Diputado Nacional de 39 años y agregó “su
legado en tan importante porque no sólo luchó
por la igualdad de género sino también por la
construcción de una sociedad mejor”.
Llegó
al Congreso de la Nación en 1983, ejerciendo su mandato
de Diputada Nacional durante dos periodos (1983/1987 y 1987/1991).
Trabajó fuertemente por la ley de divorcio vincular,
la patria potestad compartida, la pensión a la concubina,
la igualdad de los hijos extramatrimoniales y el derecho de
las mujeres de seguir usando el apellido de soltera luego de
casada.
FUENTES: Cantera Popular e Instituto Lebenshon.
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